Este proyecto, utiliza la conectividad NB-IoT para proporcionar lecturas de consumo remoto y automático. Gracias al análisis avanzado de nuestras soluciones de Big Data e Inteligencia Artificial, los contadores inteligentes enviarán datos de consumo cada hora, permitiendo a EMASESA optimizar la gestión, detectar anomalías y mejorar el servicio. Contribuyendo de esta manera a la transformación digital, a la sostenibilidad y la eficiencia del servicio de agua de EMASESA. El despliegue de contadores inteligentes supone una inversión para Emasesa de 28 millones de euros 3 de los cuales están financiados a través del PERTE del ciclo Integral del Agua, del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de digitalización del Ciclo del Agua convocada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) del Gobierno de España, financiados por la Unión Europea a través de los fondos NextGenerationEU.

Puntos relevantes del caso de éxito

Optimización y mejora del servicio

Optimiza la gestión, detecta anomalías en tiempo real y mejora el servicio.

Base de datos inteligente

La implementación de la tecnología NB-IoT no solo beneficia a la empresa gestora, sino que empodera a los usuarios. Con más de 7.5 millones de lecturas diarias, se crea una base de datos inteligente para mejorar la eficiencia del servicio.

Participación activa de los usuarios

A través de la APP “Mi EMASESA” los usuarios pueden monitorear su consumo, identificar patrones irregulares y participar activamente en metas de sostenibilidad.

Prevención de sequías

El control remoto del consumo de agua es una herramienta fundamental para combatir la sequía.

Qué dicen de nosotros

    “El proyecto es uno de los pilares del Programa de Transformación Digital a cinco años. El control remoto del consumo de agua es fundamental para combatir la sequía. La telelectura de los contadores digitales nos ayudará a bajar a 90 litros/persona y día el consumo, consiguiendo un ahorro anual del 20%, lo que en 10 años (previsión de ciclo de sequías) equivaldría a disponer de un nuevo embalse”.

    Manuel Romero, Consejero Delegado de EMASESA