Por qué Edge Computing es clave para sectores estratégicos

29 de julio de 2024

¿Te imaginas poder operar a distancia a un paciente con un robot, conducir un coche autónomo o jugar en línea con miles de personas sin ningún retraso ni interrupción?

Estas son algunas de las aplicaciones que podrían hacerse realidad gracias a Edge Computing, una tecnología que acerca la potencia de Cloud Computing (potencia de computación, almacenamiento, entornos para ejecutar aplicaciones de Inteligencia Artificial…) al borde de la red (edge). E decir, cerca del lugar donde se originan y se consumen los datos.

Esto tiene varias ventajas, como:

  • Reducir la latencia, el tiempo que tarda la información en viajar desde su origen hasta su destino y viceversa. Al estar los datos más cerca, el intercambio de información es más rápido y eficiente, lo que permite dar respuestas en tiempo real.
  • Aumentar la seguridad y la privacidad de los datos, al evitar que salgan de un territorio geográfico concreto y se envíen a centros de datos remotos localizados en otros países o regiones, donde podrían estar sujetos a otras legislaciones, normativas o riesgos.
  • Optimizar el consumo de ancho de banda, al reducir la cantidad de datos que se envían a la nube y se procesan en el borde, lo que alivia la congestión de la red y mejora el rendimiento.

Edge Computing, clave para sectores estratégicos

Edge Computing es una tecnología que puede beneficiar a muchos sectores que generan y utilizan grandes volúmenes de datos, especialmente aquellos que requieren una alta disponibilidad, una respuesta inmediata o una residencia del dato. Algunos ejemplos son:

  • Salud, habilitando la telemedicina, la telecirugía, el diagnóstico por imagen, el seguimiento de pacientes o la gestión de historiales clínicos, entre otras aplicaciones que requieren una comunicación fluida y segura entre médicos, pacientes y dispositivos médicos.
  • Transporte y logística, para mejorar la movilidad, la seguridad y la eficiencia de los vehículos conectados y autónomos, los drones, los sistemas de navegación, el control de tráfico o la gestión de flotas, entre otras aplicaciones que dependen de una conectividad de alta velocidad y baja latencia.
  • Energía y utilities, donde optimiza el funcionamiento, el mantenimiento y la seguridad de las redes eléctricas, las plantas de generación, las subestaciones, los contadores inteligentes o las fuentes de energía renovable, entre otras aplicaciones que implican una gran cantidad de sensores y dispositivos IoT (Internet de las Cosas).
  • Industria, potenciando la Industria 4.0, la automatización, la robótica, la visión artificial, Edge AI, el control de calidad o la monitorización de procesos, entre otras aplicaciones que demandan una alta capacidad de procesamiento y análisis de datos en tiempo real.

Edge Computing, 5G y la nube soberana

Para aprovechar las capacidades de Edge Computing se necesita una conectividad de última generación, como la fibra óptica o la conectividad 5G. Estas conexiones ofrecen un gran ancho de banda, una alta velocidad y una latencia mínima, lo que permite transmitir y recibir datos casi al instante.

Edge Computing y 5G son tecnologías complementarias que se potencian mutuamente y que habilitan nuevas posibilidades de interacción entre personas y máquinas, tanto en el mundo físico como en el virtual.

Por su parte, la nube soberana es un concepto que se refiere a una infraestructura de computación en la nube que respeta la soberanía de los datos de los usuarios y de los países, garantizando su protección, su control y su cumplimiento normativo.

La nube soberana se basa en la colaboración entre proveedores locales y globales, que ofrecen servicios de nube adaptados a las necesidades de cada mercado y sector.

Edge Computing es una de las piezas clave para el desarrollo de la nube soberana, ya que permite acercar los servicios de nube al borde de la red, donde se generan y se consumen los datos, respetando su residencia de los datos y su seguridad.

Conclusión

Edge Computing es una tecnología que acerca la computación en la nube al borde de la red, donde se generan y se consumen los datos. Esta tecnología tiene múltiples ventajas, como reducir la latencia, aumentar la seguridad y optimizar el ancho de banda. Edge Computing es importante para sectores estratégicos como la salud, el transporte, la energía o la industria, que requieren una respuesta rápida y eficiente a sus necesidades de datos.

También se relaciona con la conectividad 5G y la nube soberana, dos conceptos que mejoran la conectividad y la soberanía de los datos. Edge Computing es, en definitiva, una tecnología que está transformando la forma en que nos conectamos a internet y que abre nuevas oportunidades también para sectores estratégicos.