Es un ecosistema digital conectado, con millones de dispositivos que generan una enorme cantidad de datos en tiempo real. El gran desafío de las ciudades inteligentes es cómo aprovechar este flujo constante de información para optimizar servicios, mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y construir un futuro más sostenible.
La digitalización es el motor que impulsa la transformación de las ciudades en entornos inteligentes. Gracias a tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), el análisis de grandes datos (Big Data), la inteligencia artificial y la blockchain, las ciudades pueden gestionar de manera más eficiente sus recursos, optimizar el tráfico, reducir el consumo energético y mejorar la seguridad. Estas tecnologías permiten crear ciudades más resilientes, inclusivas y sostenibles, donde los ciudadanos puedan disfrutar de una mejor calidad de vida.